Un aminoácido común, que ya se utiliza en medicamentos existentes, ha demostrado la capacidad de reducir la acumulación de proteína beta amiloide, un sello distintivo de la enfermedad de Alzheimer, en ratones y moscas de la fruta. Investigadores de la Universidad de Kindai y el Instituto Nacional de Neurociencia de Japón han descubierto una posible nueva vía terapéutica para abordar el Alzheimer. Los hallazgos, publicados recientemente, sugieren que la suplementación oral con arginina podría ofrecer una forma segura y rentable de combatir un síntoma molecular clave de la enfermedad.
El problema de las placas de beta amiloide
El Alzheimer se caracteriza por la acumulación de placas de beta amiloide en el cerebro, cúmulos de proteínas pegajosas que alteran la función neuronal normal. Se cree que estas placas contribuyen significativamente a la progresión de la enfermedad. Durante años, los científicos han buscado formas de eliminar estas placas o prevenir su formación, pero muchos enfoques han demostrado ser ineficaces o inseguros.
Por qué esto es importante: El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa devastadora que afecta a millones de personas en todo el mundo y que actualmente no tiene cura disponible. La creciente incidencia del Alzheimer y otras demencias a medida que las poblaciones envejecen hace que encontrar tratamientos eficaces sea una prioridad crítica de salud mundial.
Cómo funciona la arginina en modelos animales
El estudio implicó la administración de arginina, un aminoácido comúnmente utilizado para tratar afecciones como la presión arterial alta y el dolor de pecho, en el agua potable de ratones criados para desarrollar agregaciones de beta amiloide similares a las del Alzheimer. Los resultados fueron sorprendentes:
- Reducción de placa: La arginina redujo significativamente la acumulación de proteínas en el cerebro de los animales.
- Mejora del comportamiento: Los ratones mostraron menos anomalías de comportamiento durante las pruebas.
- Reducción de la inflamación: La expresión de genes neuroinflamatorios disminuyó, lo que sugiere una reducción del daño cerebral.
Experimentos adicionales en moscas de la fruta y tubos de ensayo confirmaron que la arginina podría prevenir la formación de grupos de beta amiloide y eliminar los existentes. El aminoácido parece actuar como un “acompañante químico”, evitando que las proteínas se pleguen mal y se aglutinen.
Seguridad y traducción a ensayos en humanos
Una de las principales ventajas de la arginina es su perfil de seguridad establecido y su bajo costo. Según el neurocientífico Yoshitaka Nagai, “dado su excelente perfil de seguridad y su bajo costo, la arginina podría trasladarse rápidamente a ensayos clínicos para el Alzheimer y otros trastornos potencialmente relacionados”. Los investigadores enfatizan que la arginina puede atravesar la barrera hematoencefálica, lo cual es esencial para el tratamiento de enfermedades cerebrales.
Advertencias: El estudio utilizó dosis relativamente altas de arginina en pruebas con animales. Determinar una dosis segura y eficaz para los seres humanos requiere más investigación. Además, los resultados de modelos animales no garantizan los mismos efectos en el cerebro humano.
El panorama más amplio
Si bien eliminar las placas de beta amiloide es una estrategia prometedora, algunos científicos debaten si las placas son la causa del Alzheimer o simplemente un síntoma de los mecanismos subyacentes. De todos modos, reducir la carga de placa aún podría aliviar el daño neuronal y retardar la progresión de la enfermedad.
“Nuestros hallazgos abren nuevas posibilidades para desarrollar estrategias basadas en arginina para enfermedades neurodegenerativas causadas por el plegamiento incorrecto y la agregación de proteínas”, concluye Nagai.
El estudio proporciona otro alentador paso adelante en la comprensión del Alzheimer y las posibles opciones terapéuticas. Ahora se necesitan más ensayos clínicos para determinar si la arginina puede ofrecer beneficios similares en humanos.

























